Consejos sexuales para sexo duradero

Consejos sexuales para sexo duradero

 

Los consejos sexuales que hoy queremos compartir con todos y todas, intentan ayudar a que los lazos de la pareja sean aún más fuertes aún. Y es que ni tan sólo quince minutos, sí, esa es la media que los españoles tardan en tener una relación sexual habitualmente. Pero vamos a daros una serie de consejos sexuales para tener unas relaciones duraderas a la vez que mucho más placenteras.

 

Desde ahora, se acabó eso de cuarto de hora, ya que por lo menos las mujeres necesitamos bastante más tiempo de lo normal.

 

Ya sabemos que, tras la excitación, los hombres no tardan demasiado en querer llegar al coito o a lo sumo que les practiquen una felación.

 

La inmensa mayoría no se detienen en saborear los placeres de un sexo de calidad. Pero esto puede cambiar si le dedicamos tan sólo unos minutos a leer unos consejos sexuales que al menos les haga reflexionar.

 

Para muchos de ellos el miedo a un gatillazo, hacen que se den más prisa de lo normal en eyacular. Este miedo se pasaría si fueran un poco más atentos y durante los primeros asaltos del combate sexual, se dedicaran a tener un tiempo que dedicarla a ella. Unos consejos sexuales dedicado a los hombres.

 

La excitación irá subiendo poco a poco, no tan repentinamente, el deseo también, y disfrutar entre besos y masajes del cuerpo de una mujer es algo hermoso. No sólo nuestro pecho y nuestro culo es una zona erógena. Un paseo de besos y caricias es siempre importante antes de pasar a la penetración, y además esa propia excitación femenina ahuyenta los miedos de no quedar bien o sufrir un gatillazo.

 

Retrasar la eyaculación

 

Retrasar al máximo la eyaculación es el camino para tener unas relaciones sexuales más duraderas, y a la vez placenteras. Por ello, es conveniente no proponerse nunca un tiempo determinado, sino dejar que todo fluya sin prisa alguna.

 

Por ejemplo algo que vuelve loca a las mujeres y que se puede practicar como un ejercicio para dotar al hombre de confianza es el acto de no penetrar directamente. Así, de manera casi casual, los hombres podrán introducir un poco su pene en la vagina, sin necesidad de que sea todo. Estos juegos, además de excitantes, ayudan a la mujer a excitarse a la vez que al hombre a empezar a controlar su eyaculación.